Himnos Maravillas Espirituales

1. Cuan felices fuimos, desde que creímos, En el Cristo amado que fuera inmolado, Fue a la tumba fría y resucitado, Un hermoso día fue glorificado. 2. En la hora postrera, cuando Cristo fuera, En la cruz clavado por nuestros pecados, Tiernamente dijo, a Juan y a la madre: "He aquí tu hijo, he aquí tu madre". 3. Cuando le clavaban y le denostaban, Imploró clemencia, perdón y paciencia, En favor de aquellos que en tinieblas yacen, Pues ignoran ellos, dijo, lo que hacen. 4. En su angustia clama, "Tengo sed", exclama, Y sabes qué hicieron? vinagre le dieron, Y a aquel penitente que buscarle quiso, Le ofreció la fuente de su paraíso. 5. Con solemne calma, encomienda su alma, A su Padre amado, que ya le ha dejado, Por el vil pecado de un mundo soez, Y clama angustiado, consumado es. 

1. El Espíritu Santo, promesa del Padre, se está derramando, Bendiciones del cielo pueden contemplarse cual lluvia temprana, Mensajeros del cielo su mensaje predican, le cantan y oran, Y una fiesta gloriosa es aquella que vemos como el día esplendente de pentecostés. 2. Si nosotros pedimos la unción de lo alto también gozaremos, Que el Espíritu Santo llene nuestras vidas de gozo inefable, Bellos dones tendremos y de fiesta estaremos cantando aleluya, Sanaran los enfermos al ponerles las manos porque Dios es el mismo desde ayer y hasta el fin. 3. En el día anhelado cuando Cristo descienda con grande potencia, Cantarán las estrellas, los cielos y mares, los ríos y montes. Y todo el universo lucirá regia gala con gloria de Cristo, Que glorioso es día cuando Cristo descienda pues a todos sus fieles arrebatará.